lunes, 23 de marzo de 2009

llora el cielo de tristeza al no verme sonreir

un estruendo de sonidos
me llegan desde la ventana.
una sensación de inquietud
me invade.
mis ojos contemplan
el río juguetón del tobogan,
como cuando era niña.
el reflejo de la luz fabrica en mí
la ilusión de tener delante un arroyo salvaje.
El cielo descarga
la ira que llevo en el interior.
Juega por mí,
Lucha por mí,
Consigue llamar mi atención.
Silencio,
tristeza en el tobogán,
más silencio
quizá demasiado.
Se ha secado mi ilusorio arroyuelo
Con anhelo espero de nuevo
para jugar
luchar y ganar.
Esta vez lo haré yo,
necesito silencio, mucho silencio